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Puntos de Dolor de la Fibromialgia: Identificación, Diferencias con la Artritis Reumatoide y Tratamiento

La fibromialgia es una condición caracterizada por dolor generalizado en todo el cuerpo, trastornos del sueño, fatiga y otros síntomas que pueden afectar significativamente la calidad de vida. En este artículo, Alfonso, fisioterapeuta especializado en dolor crónico y fibromialgia, analiza los puntos de dolor de la fibromialgia, cómo se diferencian de la artritis reumatoide y cómo abordar estos síntomas para mejorar el nivel de actividad y bienestar en personas con fibromialgia.

H2: Identificación de los Puntos de Dolor de la Fibromialgia

Según el American College of Rheumatology, la fibromialgia se diagnostica mediante la presencia de dolor en al menos 11 de los 18 puntos dolorosos específicos en el cuerpo. Estos puntos se encuentran en áreas como:

1. Base del cráneo: donde los músculos trapecio y suboccipitales se unen.

2. Cuello: a ambos lados de la parte posterior del cuello.

3. Hombros: en el punto medio del borde superior del músculo trapecio.

4. Pecho: justo debajo de la clavícula.

5. Codos: en la zona donde se unen los músculos de los brazos y antebrazos.

6. Cresta ilíaca: donde los músculos glúteos tercio medio se unen a la cresta ilíaca.

7. Glúteos: en la zona donde los músculos glúteos tercio inferior se unen a la cresta ilíaca.

8. Rodillas: en la zona donde los músculos cuádriceps se unen a la rótula.

9. Manos y pies: en las almohadillas grasas de los dedos y la parte superior de los pies.

Estos puntos de dolor suelen ser sensibles al tacto y pueden causar una sensación de inflamación en las personas con fibromialgia.

H2: Diferencias entre los Puntos de Dolor de la Fibromialgia y la Artritis Reumatoide

Mientras que los puntos de dolor de la fibromialgia son áreas específicas del cuerpo en las que se experimenta dolor y sensibilidad, la artritis reumatoide se manifiesta principalmente como inflamación, deformación, y dolor en las articulaciones. Aunque ambas condiciones pueden presentar síntomas similares, como dolor y rigidez, la artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune que afecta las articulaciones, mientras que la fibromialgia afecta músculos y tejidos blandos y puede estar asociada a otras enfermedades, además de generar otro tipo de síntomas como insomnio, fatiga, ansiedad, o depresión.

H2: Abordar los Puntos de Dolor de la Fibromialgia y Mejorar el Nivel de Actividad

No se necesitan trabajar los puntos de dolor ya que sería interminable, porque un día te duele una cosa y otro día otra. Hay que ir a la causa, a la raíz del problema, de esta manera se solucionan todos los síntomas y puntos dolorosos. Para manejar y resolver los puntos de dolor de la fibromialgia es importante hacer una buena valoración y ver cuál es su origen.

H3: Tratamiento Fisioterapéutico

La fisioterapia puede ser una herramienta útil para ayudar a aliviar algunos puntos que sean muy incapacitantes, pero no puede ser el único tratamiento ni el tratamiento principal, sino un complemento.  El tratamiento puede incluir masaje, ejercicios de movilidad o estiramiento y técnicas de relajación muscular.

H3: Terapias Complementarias

Además de la fisioterapia, algunas terapias complementarias pueden ayudar a aliviar el dolor de la fibromialgia. Entre ellas se encuentran la acupuntura, la radiofrecuencia, la hidroterapia, la terapia cognitivo-conductual, la meditación y el mindfulness

H3: Ejercicio y Actividad Física

A pesar del dolor, la actividad física regular, como caminar, hacer ejercicio de movilidad, ejercicio de fuerza suave y progresivo, ejercicio en piscina o practicar pilates, puede ayudar a mejorar la función muscular, reducir la rigidez y aumentar la resistencia. El ejercicio de movilidad y de fuerza es un factor clave en la recuperación, y esto se puede practicar en distintas movilidades, desde pilates, en casa con gomas, o en un gimnasio.

H3: Control del Estrés y Apoyo Emocional

El estrés contribuye junto con otros factores a la aparición de la fibromialgia, además de poder empeorar los síntomas de la fibromialgia, por lo que es importante aprender a manejarlo de manera efectiva. Practicar técnicas de relajación, como la meditación, el mindfulness o las respiraciones, son parte fundamental para ayudar a reducir el estrés y mejorar el bienestar emocional. Además, contar con el apoyo de amigos, familiares y grupos de apoyo es muy positivo para enfrentar la fibromialgia.

H3: Manejo del Dolor y Tratamientos Farmacológicos

El manejo del dolor es un aspecto esencial en el tratamiento de la fibromialgia. Los medicamentos recetados por un médico, como analgésicos, antidepresivos y relajantes musculares, pueden ser útiles para controlar el dolor y mejorar la calidad del sueño, de forma puntual, pero no puede ser ni el único tratamiento ni el tratamiento principal. Además, es importante utilizar estos medicamentos bajo supervisión médica y centrarse en tratamientos que ayuden a resolver los factores que están generando esta situación, ya que el tratamiento farmacológico no hace que mejoremos nuestros hábitos o estilo de vida.

En resumen, un enfoque integral que incluya fisioterapia, terapias complementarias, ejercicio físico, aprender a manejar del estrés y el estado emocional, y la alimentación, no solo ayudan a mejorar la sintomatología, sino que ayuda a mejorar la calidad de vida.

Alfonso Trigo

Fisioterapeuta especialista en fibromialgia y dolor crónico. Enfoca sus tratamientos desde una perspectiva integral, poniendo como eje principal a la persona para reducir su sufrimiento y conseguir una vida sin dolor crónico.

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